Un molde es una pieza hueca que contiene la información necesaria para obtener una copia. Para ello se fuerza a un material a adaptarse a un recipiente y así convertir- se en el objeto previsto. Un molde puede utilizarse para hacer esculturas, pasteles y objetos cotidianos. Pero también puede ser mental, simbólico o absurdo: como entrar en la década de los 30. Hace un tiempo entré en ese molde y tiene forma de habita- ción que no puedo pagar. No vivo en Matrix, vivo en Tetris. Enca- jando mueblecitos plegables de almacena- miento multiusos de color blanco que así pega todo. Con la continua sensación de que al mínimo descuido podría convertirme en uno de esos muebles de Ikea. Doblada, hiperlaxa, encartonada. Sin un mísero po- rexpan que me abrace. En una caja de un solo uso con un nombre abstracto que ni yo misma recuerdo. Entonces empiezo a pen- sar que quizás nadie sacará los taquitos de madera de la bolsita para que todo aguante. Y al final acabaré, como todos, el día de los trastos en una Superilla de Barcelona. En mi caso, un miércoles.
Este articulo es parte de The Posttraumatic VOL.5 "Más de lo mismo".